sábado, 3 de abril de 2021

EL ESPÍRITU DEL BOSQUE 4

 

Al amanecer

Despertó dando un gran bostezo, y perezosamente camina hacia la ventana abriendo las puertas de par en par.

Por qué todo tiene que ser tan brillante...los primeros rayos de sol se cuelan entre las ramas de las árboles y las gotas de rocío resplandecen como si fueran perlas trasparentes.

Hace una mueca y esboza lo que podría ser una sonrisa. Sus padres están bailando una antigua canción en la cocina, se pregunta si él algún día encontrará a esa persona especial a quien tanto amar.

Respira hondo, una vez se sintió enamorado.

El viento mece las copas de los árboles con fuerza y luego baja como una suave brisa, haciendo danzar a las flores silvestres. Los fuertes juncos se mecen e inclinan ante la presencia de un gato...

¡Un gato!?

Avanza directamente hacia el muchacho, con ese andar elegante, sin dejar de mirarlo con esos grandes ojos misteriosos que parecen hipnotizarlo.

Yunho pestañea, para pronto cerrar la ventana, y al voltear... el gato está sobre su cama.

¡Tú, como entraste!

El gato lo mira un breve instante, para luego comenzar a acicalarse las orejas y luego la pancita.

¡Vete!

Yunho abre la ventana para que salga. Pero el gato no está interesado en la histérica reacción del muchacho, le parece más entretenido jugar con el atrapa sueños.

Qué sucede. Por qué gritas pregunta el señor y señora Jung.

Yunho indica su cama...

Ambos se miran y sonríen—Es adorablemente tierno...

Yunho rueda los ojos

—Como se llama tu amiguito...

—Como voy a saber y no es mi amiguito.

—Entonces debes colocarle un hombre a tu nuevo amigo...

—Por qué haría eso, y, no seré amigo de un gato. Es ridículo.

Pues el gato ya te eligió, dijo el señor Jung, mientras el gato se acomoda en la almohada, listo y dispuesto a dormir.

Más tarde

Yunho mira al gato que sigue dormido en la mullida almohada. Hace una mueca—Puedes quedarte, de todos modos, yo, me iré. Dijo agarrando una mochila. Cuando bajó con sigilo las escaleras procurando no ser descubierto por sus padres, que están en la sala...se escuchó un gran maullido. Yunho sintió que los vellos de su piel se erizaron.

—¡Shh! cállate y no me sigas. 

 El gato lo mira, luego con indiferencia caminó maullando hacia la sala para jugar con los hilos de algodón que la señora Jung estaba tejiendo.

Travieso, dijo, enrollando un poco de hilo para que el gato juegue.

Ven aquí, hijo, vamos a jugar una partida de ajedrez, dijo el señor Jung, el muchacho hace una mueca—No se jugar ajedrez.

El señor Jung sonríe—Mejor así.

Yunho rueda los ojos., hace una mueca cuando el gato comienza a tironear las amarras de sus zapatos—Gato Bobo.

Sonríe de medio lado...

Ese es un buen nombre, dijo Yunho...Su padre sonríe y estuvo de acuerdo, pero la señora Jung alza una ceja—No se debe jugar con el carácter de las hadas, pueden ser muy dóciles y amables pero cuando se enojan...

Tu madre tiene razón, dijo carraspeando el señor Jung—No hagamos enojar a las hadas.

Yunho rueda los ojos, acaso sus padres creen en esas tontas historias  que cuentan  los aldeanos?

Gatos que son hadas, es totalmente ridículo.


2 comentarios:

  1. Alguien se está enamorando de un gatito...

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  2. Bobo...el y mas que le paso a yh por que es así?
    Estuvo enamorado!?
    Seguiré leyendo
    Gracias Kira

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